lunes, 7 de diciembre de 2009

Mi alma atlética

EL DIVAN DE QUIQUE,
LOS CÓGIDOS DEL VESTUARIO
Y REYES SIGUE SIN DAR UNA A DERECHAS

Me tiene asombrado Quique. Ahora va a resultar que el problema del Atlético era una cuestión de sentar al personal en su diván, ya que tenían la autoestima por los suelos, y apretarles las clavijas. Sorprendente. Incluso los aficionados del Calderón ya entonan el mea culpa por pensar que Pablo, Perea, Antonio López, Juanito, son jugadores de alto fuste y que todo ha sido cuestión de malas vibraciones. Todavía se me parte la mandíbula de tanta aparato escénico. El entrenador asume su condición de trabajador privilegiado del club y procura calmar a un vestuario soliviantado, y que curiosamente cuando ha recibido una inyección económica, ha comenzado a respirar y a encontrar los goles que antes se le negaban. El principal problema que sigue teniendo el Atlético se centra en un vestuario totalmente dividido, que no tiene una cabeza visible para poner las pilas al personal y en el que cada jugador busca ganar sus batallas personales. Esa actitud de mimar a los peloteros, como está haciendo Quique no me gusta. Son profesionales y tienen que asumir sus culpas. Nunca son los responsables de nada y todos son derechos y escasas obligaciones. Es el momento de tener algo más de seriedad.

En cambio, el jefe colchonero me ha ganado a su causa al llamarle la atención a Reyes. Los del utreranos es para que se lo haga ver. Cada vez que habla sube el pan y el revanchismo de la peor especie con respecto a Abel no tiene nombre. Además es que nunca ha dicho la verdad. El único responsable de sus problemas era su incompetencia en el trabajo diario de los entrenamientos. No pegaba ni golpe. Ahora que ha realizado dos partidos medio normales ante Chelsea y Xerez saca pecho. No tiene perdón de Dios. Quique ya se lo ha advertido y hasta Cerezo le tendría que advertir que a la próxim salida de pata de banco le multará como corresponde. En la vida siempre tienen que ser personal. Reyes lo ha tenido todo para triunfar y solamente en su cabeza están las causas de lo poquito que ha conseguido. Debe reflexionar, aunque tengo escasas esperanzas de que lo haga, y seguro que de esta manera puede poner el Calderón a sus pies y hasta que le vuelvan a llamar para la Selección. Para ellos tiene que tener dos dedos de frente y por este lado falla el jugador. Nunca ha sido un dechado de ideas generosas.

Pese a que Quique siga asegurando a sus jefes que está seguro de que al final va a recuperar a toda la gente que tiene a sus órdenes y que cuando fracase tirará de la cantera, la realidad es que los técnicos sigue trabajando para encontrar un defensa y un centrocampista. Las posibilidades económicas son justas y los Reyes hasta nos pueden dejar carbón. Un secreto a voces. Solamente hay unanimidad entre los futbolistas en una cosa. Quieren la Copa por encima de todo. Es la deuda pendiente que tienen con los aficionados y quieren pagarles este año.

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