DE JOSEBA LARRAÑAGA
No pretendo ser un guru que os vaya a señalar el camino correcto. Mi pretensión es compartir aquellas cosas que me llaman la atención y con las cuales consigo pasar ratos más que agradables. Uno de estos momentos mágicos es El Larguero de los fínes de semana con Joseba Larrañaga, una de las voces más frescas de la radio y que junto a su equipo de producción, en especial Jesús Bueno, te permiten hacer ejercicios de imaginación a los que no estamos acostumbrados cuando nos ponemos a manejar el dial y siempre con algo fundamental en los tiempos que vivimos, como es la sonrisa a flor de piel.Me gusta hablaros de mis gustos y fobias para que sea un libro abierto para los pocos o muchos que se apunten a este blog. No voy hablar de José Ramón de la Morena, ya que aparte de pelota creo que cada uno le conoce de manera perfecta. Joseba es diferente. Es uno de sus currantes de la radio, que siempre utiliza la ironía para transmitir su mensaje y que procura algo que es muy complicado en su papel de comunicador. Que sus oyentes sean felices desde la perspectiva de pasar un rato agradable y no desde una crítica fuera de lugar. Es mucho más honesto esta filosofía y da más trabajo. Da lo mismo. Es ser respetuoso con su público. Conseguir que siempre se acuesten con una sonrisa y se duerman sonriendo. Una diamante sin pulir que el día que le permitan una alternativa en televisión va a ser una bomba de alto voltaje. Su único problema es que no se baja los pantalones con nadie y siempre es fiel a sus ideas y a su chica. Pasatelo bien. Gudaari, en Nueva York.
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